El título me sugiere que felicite a mi madre y a todas las madres, lo voy a hacer:
Felicidades
que no quiero ser una “desaboría” , aunque lo voy a ser porque hoy quiero reflexionar sobre el “complejo de madre” que tenemos muchas mujeres.
A veces nos cargamos de cosas que no nos corresponden, destinamos nuestra energía en el cuidado de los demás y nos ponemos las últimas de la lista, como madre abnegada que somos…
Creemos que el mundo depende de nosotras.
Buenas Noticias:
NO es así.
Las personas adultas están capacitadas para sobrevivir sin nuestra ayuda. Nuestros maridos, en el mejor de los casos, tienen dos manos y pueden hacerse la comida, prepararse la ropa, plachar, limpiar la casa ¡¡incluso el BAÑO!!
Los señores de más de 12 años sienten el frío y el calor (igual que nosotras) y saben cuando necesitan una chaquetita…
Las personas adultas saben si quieren comer más o no, si quieren sentarse o permanecer de pie.
El mundo seguirá girando y funcionando (que no digo que funcione bien) aunque nosotras nos tomemos la licencia de sentarnos un rato en el sofá, de tomar un café con una amiga o hacer una locura como… ¡¡ECHARSE una siesta!!
Madres del mundo abandonemos a nuestros hijos mayores de edad.
Demosles la oportunidad de crecer, de hacerse cargo de sus cuerpo y sus vidas y empecemos a vivir las nuestras.
Vamos a maternarnos a nosotras mismas, a querernos y protegernos, a cuidarnos como hacemos con nuestros “hijos” a ponernos el filete más bonito en el plato. Eljamos nuestras vacaciones, viajemos solas, hagámonos llamadas para ver qué tal estamos, escuchémonos un rato…
Por nuestro propio bien y el de nuestros “hijos“.
DEskarao
jajaja un poco de descanso a la madre incansable que todas llevamos en la chepa por favorrrr