Mañana será otro día. Hoy me quedo en la cama. Mi cuerpo me lo agradecerá. Hay una parte de mi que no para de echarme la bronca. Tendría que salir, Voy a retrasarme, ya lo estoy dejando…
La otra, más realista, se hace cargo del calor que tengo en todo mi cuerpo y la necesidad de parar y meterme en la cama.
Limpieza profunda.
Lo necesitaba.
Ya era hora.
Me gusta.
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